Contribuyó a dilucidar la situación de la "nutria gigante" en la Argentina

(1988 a 1992)

En este período, con el apoyo de la Dirección Nacional de Fauna Silvestre y la Fundación para las Especies y el Medio Ambiente (FUCEMA), lideró campañas al norte argentino (Corrientes y Misiones), para dilucidar la situación de una especie amenazada de extinción. El lobo gargantilla, también conocido como nutria gigante o "ariraí".

Sus compañeros del llamado Proyecto Ariraí fueron Mariano Masariche (preparativos y relevamientos iniciales en Corrientes) y Andrés Bosso (relevamientos en Misiones).

Este fascinante y gran mamífero carnívoro, habitó varios cursos de agua de la Argentina a mediados del siglo XX, existiendo poderosos relatos de sus apariciones. Sin embargo, ya no existía más que el recuerdo de su presencia y el Naturalista Juan Carlos Chebez había instalado la preocupación por su situación y persuadió personalmente a Aníbal Parera (que contaba entonces con 18 años de edad) a lanzarse en su búsqueda.

 

Pasé años de desvelo por la situación de esta especie, imaginándo encontrármela en los ríos o arroyos que explorábamos en su búsqueda. Sin embargo, nunca encontramos más que algunos rastros antiguos y relatos de viejos pobladores...

En esta etapa Parera leyó libros especializados, escribió numerosos artículos, presentó resultados del progreso de sus evaluaciones en congresos como las "Reuniones Técnicas de Trabajo de Especialistas en Mamíferos Acuáticos de Sudamérica". Su conclusión: la especie parecía haberse extinguido recientemente de la Argentina y fue publicada en la revista Naturaleza & Conservación, bajo el título: "La nutria gigante: rastros de una extinción reciente en la Argentina".

Con el devenir de las campañas se acumulaban avistajes y valiosa información de otra especie poco conocida, aunque no amenazada, de la Argentina: el lobito de río (Lutra longicaudis), de manera que comenzó a dedicar atención específica al estudio de su biología. Este trabajo produjo una importante cantidad de información y de publicaciones en sus primero años de carrera.

Aníbal F. Parera integró entonces del Grupo de Especialistas en Nutrias de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) y recibió la ayuda de su coordinador para sudamérica, el Lic. Claudio Chehébar, para más tarde obtener un subsidio de la Lincoln Park Zoological Society de Chicago para realizar prospecciones sobre su biología trófica y estado de conservación.

 

 

Foto: Andrés Bosso (obtenida recientemente en el Pantanal de Brasil).